"Me gusta andar, pero no por el camino. . .
lo seguro me parece aburrido"
F.C.
Por cada lápiz que tenga el escritor debe tener dos borradores. Un buen escrito es lo que queda después de borrar bien. Más que saber escribir es necesario saber borrar. Un mal escritor no es otra cosa que un mal borrador.
De lo que hemos escrito nos arrepentiremos muchas veces; de lo que hemos borrado nunca.
La punta del lápiz es muy dura, el borrador muy suave. El que escribe ha de ser al revés: suave al escribir; duro al borrar.
Hay quienes buscan un maestro que les enseñe a escribir. Mejor sería hallar a uno que les enseñe a borrar.
Ahora vengo. Voy a buscar un borrador. . .
Algo pasa con nosotros que estamos perdiendo el impetu de antaño, por ejemplo ya no es muy común que escuchemos que Juanito se robò a Lupita, pienso que es por la presión social que existe actualmente, nuestra pìramide de valores se encuentra de cabeza, lo cual quiere decir que hoy anteponemos cosas como la imagen, la vanalidad, etc, a conceptos más humanos(?). Al ser humano se le estan cerrando los sentidos, cada vez requiere más intensidad, como los sordos. No vemos lo que no tiene la iluminación de la pantalla, ni oímos lo que no llega a nosotros cargado de decibeles, ni olemos perfumes. Ya ni las flores los tienen. No hay otra manera de alcanzar la eternidad que ahondando en el instante, ni otra forma de llegar a la universalidad que a través de la propia circunstancia: el hoy y aquí. Y entonces ¿cómo? Hay que re-valorar el pequeño lugar y el poco tiempo en que vivimos, que nada tienen que ver con esos paisajes maravillosos que miramos en la televisión, pero que están sagradamente impregnados de la humanidad de las personas que vivimos en él.
Aqui seguimos vivitos y coleando, mala hierba nunca muere jajajaja,y sin darnme cuenta este Blog cumpliò su primer aniversario¡¡¡¡ Aún tengo mucho que expresar a través de esta ventana, muchos trazos que realizar, muchas preguntas que responder; en fin espero sigan pasando por aqui de vez en cuando, cuando sientan que les gruñen las trpias de su corazón.